Las ilusiones

"A veces tengo la sensación de que voy buscando una historia que encaje en la película que siento por dentro", ha escrito Jonás Trueba.
"Las ilusiones" me recuerda un poco a "Los que sueñan despiertos", que se llamaba también Restless, un corto ¿iluso? de Félix Viscarret que me enorgullece haber coproducido.
Pensar en las dos cosas, el libro y el corto, me hace sentir un poco mayor, muy inspirada, y un poco demasiado sensata. También trajo a mis ojos calles ahora no reconocibles, lugares de otro tiempo donde la vida ardió, viejos teatros o cafés difuntos. Doce y media. Cómo pasan las horas.
En cualquier caso, el libro y el corto me emocionan, me fascinan y me inspiran un cierto joie de vivre melancólico, una ilusión y una inquietud que os recomiendo a todos. Ole por Jonás, por Félix y por Constantine.

La opinión de los otros

Cuando la gente te dice que algo falla o que no les funciona, casi siempre tienen razón. Cuando te dicen qué es exactamente lo que está mal y cómo arreglarlo, casi siempre se equivocan.

De las 8 reglas de escritura de Neil Gaiman, leídas en http://www.brainpickings.org/index.php/2012/09/28/neil-gaiman-8-rules-of...

Dinero

Un enlace que me ahorrará muchas respuestas acerca de lo que cobra un guionista por su trabajo:
http://lasolucionelegante.wordpress.com/2013/03/08/precios-de-guion-no-o...

Bien es verdad que hay guiones de telefilm que se pagan a 18.000 euros, y guiones de largo a 36.000, y sinopsis que se hacen gratis o tratamientos por 2.000 con la esperanza de cobrar en el desarrollo, y esa esperanza a veces se cumple y a veces no. Aquí va otro link interesante sobre la fe: http://demasiadovioleta.blogspot.com.es/2013/03/si-eso-pasa-o-una-receta...

Ahora bien, si es difícil encontrar cantidades orientativas sobre el trabajo de guión, sobre el trabajo de consultoría de guión ni te cuento. Por eso siempre remito a: http://bloguionistas.files.wordpress.com/2009/12/tarifas-bloguionistas-2... cuando alguien quiere saber de precios de análisis "en general".

Mis tarifas son flexibles, según el tiempo que tenga en ese momento, y en principio no distingo entre leerme un tratamiento de 20 páginas o un guión de 100 (el tiempo de lectura es lo de menos), y básicamente hago 2 cosas: o un análisis de "cómo está el material", como el que haría el lector de una productora, por unos 200 euros; o unas notas de desarrollo de 8 o 10 páginas señalando los puntos débiles y haciendo sugerencias para mejorarlos, por unos 500. Eso sí, últimamente cobro la mitad por adelantado para evitarme marrones o pagar ivas jamás cobrados.

No sé qué cobran otros consultores de guión, pero si me lo dicen y quieren que se sepa, iré completando este post sobre dinero. Y el próximo en cambio será sobre algo sutil, ingrávido y gentil.

La esencia de lo que pasa

Preferir las novelas a la prensa, y el documental de animalitos al telediario, hace que uno no tenga mucho contacto con la actualidad. Me entero de lo que pasa porque mis amigos me lo cuentan, me entero por twitter o por el muro de facebook, que cada vez se parece más a un periódico de Hearst. La actualidad tiene además algo agotador, y es que no se queda quieta, no hacen más que pasar cosas. Trabajando con guiones, siempre acabo preguntando: pero de qué va tu historia, qué es lo importante, esto qué quiere decir, "en general", porque me agotan los detalles. La mitad de las veces te vuelven a contar todo lo que pasa, por qué, y qué pasa luego, pero al final sueles llegar a la esencia de la historia. Y es clarificador, maravilloso, euforizante. De repente, lo entiendes. Y ya puedes poner manos a la obra.
Tuve un profesor de historia, Don Gonzalo Redondo, y subrayo el don, que consiguió hacer lo mismo, contar en una frase de qué iba todo, desde Adán y Eva hasta los noventa, que fue cuando me dio clase. Y tenía sentido. Cuánto me gustaría que hubiera un guionista detrás de todos los muros de facebook y todos los tweets y todo lo que me dicen mis amigos, para poder decirle: me agotan los detalles, dime de qué va esto, en realidad. Porque no estoy entendiendo nada pero querría poner manos a la obra.

Modales (2)

En los últimos quince días, mis charlas sobre desarrollo de guión (una en la UPSA, otra en la UN) han dedicado una buena parte de su tiempo a intentar hacer del Development Hell algo un poco menos infernal. El martes que viene, en la ECAM, seguiré insistiendo. Cosas de sentido común como buscar algo positivo que decir de primeras, cosas prácticas como poner por escrito las conclusiones de la reunión y enviarlas a la gente involucrada, cosas maquiavélicas como mantenerse en una gran barbaridad hasta el último momento, cosas tan tontas y tan necesarias como confirmar que has recibido un correo o dar las gracias. Otro día, y con más tiempo, sigo con más cosas: si tienes alguna aportación o sugerencia no dudes en mandármela por email.

Development job offer

MARK MILLER
Excuse me, I wanted to introduce myself. I'm Mark Miller. I'm head of new development at Paragon.

C.J.
C.J. Cregg.

TOBY
Toby Ziegler.

MARK
Oh, it's good to meet you both. C.J., I was wondering if my money buys me a few words alone with you.

TOBY
Throw in a box of chocolates and a pair of nylons, get you a lot more than that.

C.J.
Sure.

C.J. and Mark start to walk off.

TOBY
I'll be over at the bar, drinking a lot, if anyone wants me.

C.J.
Nobody will.

Toby holds up his glass as Mark and C.J. walk through the house.

MARK
I'll come right out and say it, C.J. I'm a big fan.

C.J.
Thank you.

MARK
Yeah. And I think that there's a place for you in our company.

C.J.
Doing what?

MARK
Development.

C.J.
Of what?

MARK
Development of projects.

C.J.
What's that mean?

MARK
You'd be developing feature projects.

C.J.
Movies.

MARK
Yeah.

C.J.
You know what? You want Toby or Sam. I'm not a writer.

MARK
Oh, no, we have writers.

C.J.
Well, I certainly can't direct or act.

MARK
No, you'd just be in development.

C.J.
And what's that?

MARK
Shepherding projects - developing them.

C.J.
I thought a guy writes a movie, and a guy directs a movie.

MARK
Sure.

C.J.
And in between there are designers and technicians and actors.

MARK
Yes.

C.J.
So, tell me what I do again?

MARK
Development.

C.J.
Okay. Well, at the moment I have a pretty good job and I understand what it is, so, uh, I sure appreciate... [spots Sam walking past] Sam! [to Mark] I appreciate it, Mark, I'm sorry, I've got to talk to Sam about a thing the President wants me to... [She
walks away with Sam.] Pretend you're talking to me.

SAM
I am talking to you.

C.J.
Walk me outside.

SAM
Did he offer you a development...?

C.J.
Yes!

SAM
Me, too. Do you know what it is?

C.J.
No.

SAM
Me, neither.

El bunker de la Casa Blanca

Había visto El ala oeste de la Casa Blanca, pero no había visto El Ala Oeste de la Casa Blanca. Había visto alguna temporada, y capítulos sueltos. Me gustaba, pero quizá por la moralina democratota o por la brillantez artificial de los diálogos, la verdad es que no me había enganchado. Muy buena, sí, qué bueno Sorkin, qué bien tratar a los espectadores como gente inteligente bla bla bla.
Estas navidades decidí buscar refugio en alguna serie bien larga, y esperar a que escampase. Así que fue en el ala oeste. Un día estuve ahí 27 horas seguidas. Comía frente a la pantalla, y como era la pantalla de un portátil, me acompañaba a todas partes. Me refiero a todas partes.
Me tragué los últimos tres o cuatro capítulos de la séptima temporada con una especie de angustia de final de viaje. No podía parar de verlos, y a la vez temía llegar al final. Sabía que me iba a quedar más huerfanita, y así ha sido.
He salido de la serie inspirada y queriendo hacer cosas importantes. He salido triste porque sé que esa Casa Blanca idealizada no existe ni ha existido nunca, he salido satisfecha porque han conseguido lo que pido a la ficción, y que explica Tabitha Fortis –“You think I think that an artist's job is to speak the truth. An artist's job... is to captivate you for however long we've asked for your attention”. He salido nostálgica porque nunca podré verla otra vez por primera vez; y he salido esperanzada porque CJ está en California, y deprimida porque quién sabe si soy Toby, y motivada porque trabajo en ficción y la ficción salva vidas, y frustrada porque nunca trabajaré en algo tan bueno como El ala oeste. Pero sobre todo salgo agradecida porque me ha dado asilo estos días y ahora ya está, ya han pasado. Muy feliz año a todos.
Y ved El ala oeste.

La policía del guión

Script cops.
Posiblemente ya lo conozcas, pero si no es así, tienes que verlo.
http://vimeo.com/7027154.

Lecturas cruzadas

¿Para qué sirve un analista? ¿Es un encuestado sobre el interés de una historia? ¿Un coguionista momentáneo que sugiere mejoras concretas en el guión? ¿Un coach que ayuda a que el autor siga escibiendo y escribiendo bien? ¿Un profesor de la Dramática de Aristóteles en alguno de sus refritos? ¿Una figura de autoridad que puede avalar un guión antes de empezar a pasearlo? ¿Una figura de autoridad que te convence de que "por aquí no vas bien"?
Cuando hay analistas: ¿cuantos más, mejor? ¿cuando hay varios, es mejor si están de acuerdo? ¿o es mejor que surja el debate entre ellos? ¿mejor que escriban sus propios guiones, mejor que no sean ellos mismos guionistas? ¿mejor que conozcan al autor del guión analizado? ¿mejor que lean un guión sin saber de dónde viene?
Hace dos semanas -los viajes me vuelven inconstante con este blog- surgieron todas estas cuestiones y muchas más en el curso de story editors organizado por el CNAC en Caracas. Y no llegamos a conclusiones definitivas ni verdades absolutas.
Fue tan interesante hablar con las Cármenes, con Frank, con Mª Inés, con Ana Cristina, con Liris, con Belén, con Pilar y Gabriela, y con Jimmy, que si la vida fuera no nos reclamase, creo que podríamos seguir hablando y hablando de historias diferentes y no llegar a LA conclusión definitiva. Y es que, por fortuna, nuestra "ciencia" sigue siendo una ciencia del depende, del según, y cambia con cada cuento y con cada forma de echarlo.

Las primas tienen padrino

La semana pasada, en el festival de Isla Margarita, el magnífico Senel Paz y yo tuvimos el placer de asesorar seis guiones seis procedentes de varios países latinoamericanos. Los participantes, estupendos. El lugar, maravilloso. La experiencia, genial. Lo cuento aquí no sólo por presumir, también porque me ha llamado mucho la atención que todos los guionistas del taller fueran conscientes de "lo que querían transmitir", "el discurso".
A mí me gusta manejar el tema / mensaje como herramienta de desarrollo, y no acostumbro a toparme con escritores que lo traigan pensado de casa. Suelen haber pensado "de qué va", "qué es lo que pasa en la historia", pero no "qué significa".
Quizá fuera coincidencia, quizá mi experiencia no es tan amplia como para generalizar. Pero anda que no estaría bien que en las películas de aquí hubiera más acciones, y en las de casa más ideas.

Distribuir contenido